Perros complicados

Perros complicados. Ema Wolf

Suerte de catálogo de los perros más insospechados, concebido a manera de relatos, viñetas breves, cartas y tests, con un afilado sentido del humor y una prosa sencilla e imaginativa. El manejo de los resortes del absurdo, la farsa y la ironí­a convierten estas narraciones en atractivas propuestas para un amplio rango etario de lectores. 

Los recursos explorados por Ema Wolf son diversos y efectivos: desde la parodia a clásicos de la narrativa universal para niños como El mago de Oz ("Un deseo") hasta el uso de la epí­stola ("Guarderí­a") y los tests ("Test online de inteligencia perruna"). Lo lúdico, lo irreverente y la crí­tica social se conjugan con desenfado en este singular homenaje al llamado mejor amigo del hombre. ¿Mis relatos favoritos entre los trece que incluye el libro? El rocambolesco y costumbrista "El confuso perro de Manolo" y el no menos disparatado "¿Hay algún veterinario en la sala?", de ambiente teatral. En ellos, el personalí­simo "toque Wolf" se aprecia en todo su esplendor.

La de Perros complicados es, sin embargo, Ema Wolf un tanto diferente ”“por la extensión de los relatos y los matices del humor”“ a la que recordarán los admiradores de Cuentos chinos y otros cuentos no tan chinosLos imposibles y otras obras de la década de 1980 que se inscriben en la primera etapa creativa de esta sobresaliente autora argentina. Eso sí­, lo que permanece intacta es la alineación de la autora, siempre, del lado de la irreverencia y lo polí­ticamente incorrecto.

Javier Gómez